suscripciones

8/18/2023

“El Alto, la esperanza del MAS-IPSP”*Ygg

 *Más allá que el ¿Congreso del MAS IPSP?*



*“El Alto, la esperanza del MAS-IPSP”*


*Por: Freddy Magno Mamani Mollo* Amawta y Experto en Derechos de los Pueblos Indígenas.


En 8 de agosto sale un análisis -de J. Llorenti- sobre la disputa de; en qué lugar debería llevarse a cabo el congreso del MAS. La elite dirigencial de este partido impone que sea en el Trópico de Cochabamba y los sectores sociales junto a otras vilipendiadas autoridades exigen que se realice en la ciudad de El Alto; Ciudad Capital de los Andes.


Enfatiza, que ambos tienen argumentos se sobra pero lo peligroso es la _“bifurcación del centro gravitacional de poder y legitimidad del MAS”_ y que apertura la diferencias entre quechwas y aymaras. Denotando la existencia de la división de lo cuantitativo y cualitativo del proceso político del MAS. Y que actualmente las disputas serian entre estas dos naciones y que ambas tienen como factor cualitativo al sujeto indígena. Y cuya solución sería trasladarlo a un 3er lugar y evitar la disociación del núcleo de legitimidad social político del MAS.


Si bien este análisis proveniente del interior del propio MAS (J. Llorenti según datos de la Contraloría estaría trabajando en el Ministerio de Gobierno) es válido y sugestivo. Sin embargo, presupone factores trascendentales como la “identidad” que en la actualidad ni los propios “intelectuales aymaras” han podido armonizar. _Llorenti asume acríticamente que territorialmente El Alto es Aymara y el Trópico es Quechwa._


Dicha afirmación es condición _sine qua non_ para su análisis, a partir de esto se evidencia que comprensión de dicha disputa se halla en la conformación y comprensión colonial de lo que fuese lo aymara y lo quechwa. Se puede afirmar esto porque fue con las Encomiendas en la Colonia que los Encomenderos (españoles que se le otorgaba un territorio y junto a él, a indios como vasallos) intentaron homogenizar a nuestros pueblos basados en un criterio de uso lingüístico sea: aymara o quechwa. Y por ende este acercamiento esta -nomás- subsumido en la narrativa oficial-colonial y republicana de la historia en este territorio.


La lectura sobre la disputa entre naciones ancestrales irremediablemente tiene como resultado la ruptura con la mera forma política coyuntural que se supo capitalizar en el MAS. Sin embargo, el proceso histórico a largo plazo y desde la memoria de los pueblos sobrepasa esa mera forma partidaria. Llorenti también asume que es al interior del propio MAS que se desarrolla lo cualitativo de este partido a la cabeza de Evo Morales, pero, no es así, pues lo cualitativo de un proceso político siempre se halla en el factor externo de la realidad que sobrepasa a todo forma partidaria que subjetiva a la misma realidad.


Cuando actores políticos de El Alto indican que este congreso debe llevarse en El Alto, no es por capricho y punto, sino, refleja el profundo sentir histórico-político de aquellos que siempre apoyaron pero que se les ha vilipendiado continuamente. Esta no es una disputa de aymaras contra quechwas, sino, es una disputa entre “subjetividades”: entre los que tienen una subjetividad moderna de dominación basados en una política vertical y caudillista (en la que Izquierda y Derecha son cara de una misma moneda) y una subjetividad No Moderna de Liberación en la que se halla la política comunitaria horizontal para la vida de todos (proveniente de la larga lucha anticolonial y espiritual) en la que el sesgo idiomático o fenotípico se elimina y aparece con prudente claridad el horizonte político abandonado por Evo Morales; que es el Vivir Bien y la Bolivia Plurinacional.


La disputa de subjetividades va más allá de la pertenencia a lo indígena o no indígena (sea quechwa o aymara), sino, que conlleva el compromiso por un “mundo en el que quepan otros mundos” y basado en la espiritualidad ancestral de este territorio. La subjetividad de liberación ancestral, subsume a todos los sujetos libertarios, rebeldes, anticoloniales, indígenas o no indígenas, que tienen como prerrogativa la vida de todo el proyecto. (Así como hay indios de derecha/izquierda MODERNOS, hay q´aras que aman la libertad de los pueblos y lo ANCESTRAL). Entonces la disputa ya no se enfrasca en el tema identitario (que ya es un problema en sí mismo).


Entonces, bajo esa óptica, Evo y su viejo entorno no tienen alternativa de cambio. Están estancados en la vieja forma de hacer política en la que matar o morir es imprescindible (política de la muerte). Por ello el congreso del MAS en Cochabamba tendrá como resultado elegir a Evo como presidente del MAS y tener el camino para ser candidato presidencial de este partido político debiendo sumar la locura del Poder por el Poder mismo y todos lo sabemos.


Por el contrario, LO FUNDANTE en este tiempo para el Proceso de Cambio es llevar el congreso del MAS en la ciudad de El Alto. Una tercer sede -tal como dice Llorenti- solo alargará una agonía latente. Sin embargo, nadie sabe que es lo que pasaría en un Gran Congreso realizado en la ciudad de El Alto, porque, esta ciudad es irruptiva por naturaleza pero sus decisiones políticas siempre han sido las correctas, por ejemplo la agenda de octubre marcó el quehacer político desde el 2003, el Cabildo de 2007 por la unidad de Bolivia y la impostura política en 2019 ante el “golpismo” que salvó al propio MAS.


Llevar el Congreso del MAS IPSP en El Alto, sería la llave mágica para la reconducción del Proceso de Cambio pues El Alto, a diferencia de lo que dice Evo (que siempre se pelean entre ellos), ha marcado horizonte de sentido y de amor a esta tierra – Pachamama, pues ha regado con la sangre de sus hijos e hijas (desde 1781 hasta el 2019) el destino en favor de sus hermanos y hermanas de Bolivia. Y ni qué decir del MAS que sin el poder de esta ciudad -Capital de los Andes- habría sido proscrita al recuerdo en el 2019.


Llevar el Congreso del MAS IPSP en El Alto demostraría de qué esta hecho Evo Morales y si está a la altura de la historia. Pero hay que recordar que El Alto, se halla en la lógica de “No me jodas y no te jodo” (título de unas crónicas alteñas de 2018).

No hay comentarios:

Publicar un comentario

chat



 

Colabora

EL TEMIBLE MALLKU DE LA INSURRECCIÓN

 A cuatro años de su muerte EL TEMIBLE MALLKU DE LA INSURRECCIÓN En septiembre de 2003 empezó la “guerra del gas”; Felipe Quispe fue protago...