"Yo no diré lo que ya dijo nuestro fiscal general: «Lula es de la CIA». Esto sólo lo aclarará el futuro.
Lula tendrá sus razones para oponerse al ingreso de Venezuela a los BRICS, importantísimo grupo que partirá en dos la historia del mundo contemporáneo. Nada tiene que ver la posición de Lula con los resultados electorales en Venezuela.
En política nada es lo que parece. Pronto sabremos cuáles son las verdaderas razones del expresidiario y manso presidente de Brasil.
Por lo pronto, yo asomo una conjetura, una hipótesis: la actual esposa de Lula es una agente del gobierno norteamericano.
Cuando Lula cayó preso, acababa de morir su esposa y cuando salió de prisión, después de saludar a quienes lo esperaban a las afueras de la cárcel, lo primero que hizo fue presentarles a su nueva esposa. Quienes estaban en mi casa pueden dar fe de que de inmediato, mi comentario fue: «ya le sembraron alguien de la CIA al pendejo de Lula».
Y no es que yo sea adivino ni nada parecido, pero algo he aprendido en este caminar de toda una vida dedicada al estudio de estos asuntos. Si fuera por cuestiones de democracia, ¿cómo justifica Lula estar en un grupo donde el mayor socio es China, país de un solo partido político; o Arabía Saudita, donde ni partido hay. No. Nada tiene que ver su no a Venezuela con resultados electorales. Es, en mi opinión, aventurada, pero no majadera, más un asunto de jóvenes y expertas pantaletas dadas a olisquear a un viejito que aprovecha para pretender estar bien con dios y con el diablo.
Su actitud no quema a Maduro, por el contrario, si la mayoría de los chavistas son como yo, y lo son, lo atornilla en nuestros corazones.
Cuidadito si el que sale quemado es el propio Lula, porque la verdad es que China y Rusia quieren a Venezuela en el grupo, y esta actitud de Lula pone los ojos de estos dos países sobre las espaldas de Lula y de su señora esposa”.
Eliézer SalinasP
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